No tienes ni idea de lo
que es de verdad desear acabar con todo. Querer desaparecer y dejar de sufrir de
una vez por todas. Tengo que confesarte algo: yo quise terminar con ese
dolor que me corrompía. Quise desaparecer, pero por suerte, me pare a pensar en cómo seria
para los demás. En como pasarían los días y en que se basarían sus risas y alegrías. Pensé. Y llegue a la conclusión que había personas que me
necesitaban para que su mundo estuviera en orden. Para que todo fuera bien y pudieran ser felices. No lo hice por ellos, no salte al más profundo de
los abismos por aquéllos a los que realmente su vida cambiaría si yo desapareciera. Tuve
suerte de ser consciente de lo que causaría mi muerte.

Por todo eso, no puedo consentir que me digas que no te entiendo, porque soy posiblemente quien mejor lo haga. Si, sé que es duro, pero debes saber que te vas
a encontrar con mil y una adversidades que te derrumbaran. Pero no puedes
permitir que te hundan.
La vida no ha sido justa contigo, es cierto, pero
tampoco es justa con nadie.
Vaya, nunca hay que dejar de luchar, estamos acá por una razón especial y nos vamos solo cuando la acabamos, de otro modo volveras acá y tendras que hacer lo mismo una y otras vez, hasta que hagas lo que te fue ordenado.
ResponderEliminarHay formas y formas de verlo, pero pase lo que pase, hay que tener presente que tenemos luchar siempre por aquello que nos hace feliz... Gracias por el comentario :)
ResponderEliminar